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Pinceladas de Cádiz
¿Quieres ver Sanlúcar? o Sentir Sanlúcar
Es nuestro pequeño paraíso terrenal. Es naturaleza, es sol, es buen humor y fraternidad. Es una forma diferente de entender la vida. Déjate marcar por su gente, maestros en el arte de la felicidad y te prometemos que será un recuerdo imposible de borrar. Sanlúcar es diferente.
El Castillo construido por El Duque don Enrique para defender la villa y la entrada al Guadalquivir, se alza hoy como uno de los monumentos referencia de la ciudad.
Las Covachas, o tiendas de las Sierpes, es la lonja de mercaderes de estilo gótico declarado monumento histórico artístico para la ciudad de Sanlúcar. Admira la
belleza inquietante de sus basiliscos, figuras mitológicas que descansan sobre cada uno de sus pilares.
Deja que te contemos un poquito de su historia. Las Covachas fueron construidas por Enrique Pérez de Guzmán y Meneses, II duque de Medina Sidonia, a finales del siglo XV, junto a la Alcaicería y a la calle de los Bretones, junto a la Puerta del Mar, que era la principal zona comercial de Sanlúcar.
En 1744, el concejo de la ciudad permutó a los monjes Jerónimos las Covachas, que le habían sido cedidas por fray Felipe de Guzmán, segundo hijo del sexto duque. A cambio de las Covachas, los Jerónimos recibieron la carnicería que existía en la calle Siete Revueltas.
En el siglo XVIII, junto a ellas, se construyó una nueva Plaza de Abastos, que es la que encontramos actualmente en la ciudad, por lo que, además de poder admirar su belleza, podrás disfrutar del encanto de comprar en un mercado con tanta historia.
Si por algo destaca Sanlúcar, a parte del Buen Comer, es sin duda alguna, por el Buen Beber. Y esto, entre otras muchas razones, se lo debe a Bodegas como las de Barbadillo,
mundialmente conocidas y toda una experiencia sensorial que os recomendamos disfrutar.
Su historia comienza en el siglo XIX, cuando Benigno Barbadillo y Ortigüela, junto a su primo Manuel López Barbadillo, se instalaron en Sanlúcar de Barrameda procedentes de México.
En aquel país, Benigno logró hacer fortuna gracias a los negocios de su tío y a sus múltiples empleos relacionados con los inmuebles, las boticas, los préstamos o la importación de vinos españoles, la cual le permitió emprender su aventura española.
Hoy, sus 17 bodegas repartidas por toda Sanlúcar de Barrameda, rodean el castillo medieval de Santiago, y ocupan una superficie total de más de 70.000 m², a los que hay que sumar las 500 hectáreas de terreno propio y una planta de vinificación de uvas blancas y tintas, a los pies de la Sierra de Gibalbín y Santa Lucía.
Barbadillo es una bodega cien por cien familiar, productora de cuatro denominaciones de origen: Jerez-Xeres-Sherry, Brandy de Jerez, Vinagre de Jerez, y Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda; además de los Vinos de la Tierra de Cádiz.
No marchéis sin visitarlas y sin disfrutar de sus catas, os van a encantar.